Diez visiones de Julián Herbert
Me viene una visión: correrás bajo la lluvia sin paraguas con bolsas de mandado rompiéndose y una perfecta sensación de calecetines húmedos.
Me viene una visión metempsicótica: el bol minimalista donde bracea tu fat free rigatoni viene de piedras tibetanas arrojadas con la orina.
Me viene una visión: alguien está buscando tu casa para darte una buena (y sin embargo banal) noticia. Y no encuentra tu casa. Nunca.
Me viene una visión: ese desasosiego permanente con el que te levantaste se debe a que, aunque no lo recuerdas, soñaste con arañas.
Me viene una visión: las llaves que perdiste acaban de caer en manos de un ser muy turbio. Una de ellas abre todavía el acceso a donde estás
Me viene una visión: ángeles de la guarda subastan en el infierno las almas de toda esa gente que lee ridículos libros cursis sobre ángeles.
Me viene una visión: el único motivo de tu amor autoritario por King Crimson es la culpa de tararear en sueños a Pablo Milanés.
— Julián Herbert (@julian_herbert) 30 de abril de 2012
Me viene una visión: esas flores tan cercanas y que tanto te gustan planean a tus espaldas una revolución con sacrificios humanos.
— Julián Herbert (@julian_herbert) 30 de abril de 2012
Me viene una visión: irás a la playa a caminar en calcetines y, en el más plácido momento, notarás que te robaron los zapatos. @aasiain
— Julián Herbert (@julian_herbert) 30 de abril de 2012
Me viene una visión: por siniestra armonía, cada vez que te despiertas en la madrugada alguien se suicida saltando de un puente.
— Julián Herbert (@julian_herbert) 30 de abril de 2012
La serie, como se ve, empezó hace un par de días; uno espera que vaya para largo.